PARA EL JUBILEO EN ROMA, QUE NO FALTE LA “OBRA” DE LA CARIDAD CRISTIANA: PALABRAS DEL PAPA AL CÍRCULO DE SAN PEDRO (24/06/2024)

El Papa Francisco recibió este 24 de junio, en la Sala Clementina, al “Circolo San Pietro”, cuya misión es servir a los necesitados y realizar labores de voluntariado, y animó a los miembros a transmitir a los jóvenes su “herencia de valores y experiencia”. De cara al Año Santo, invitó a los voluntarios a cuidar “el corazón y la carne de los pobres que, como decía San Lorenzo, son el tesoro de la Iglesia”. El Pontífice señaló en este sentido el testimonio de Pier Giorgio Frassati, “que pronto será santo”. Compartimos a continuación el texto de su mensaje, traducido del italiano:

Queridos hermanos y hermanas del Círculo de San Pedro, ¡buenos días y bienvenidos!

Siempre me agrada encontrarlos, porque mi audiencia con ustedes está bajo el signo de la gratitud, que es el buen “sabor” de la vida. Cuando recibo al Círculo de San Pedro, siento gratitud por el servicio que prestan a los pobres de Roma. Y sé que lo hacen en nombre del Papa, en nombre de la Santa Madre Iglesia. Y, por favor, dirijo un saludo a su Presidente que está enfermo. Le deseo una pronta recuperación; salúdenlo de mi parte.

Esto que hacen en nombre de la Iglesia también está documentado por el volumen que han elaborado y que me regalaron hoy: la recopilación de todo el magisterio de los Papas al Círculo de San Pedro, en los 155 años de su historia. Y entonces gracias también por este trabajo, que es importante para la memoria de las raíces. Las raíces son fundamentales: sin raíces no hay vida, no hay futuro. La elegancia de las hojas está ligada a la buena salud de las raíces. Por lo tanto, alabo este trabajo y les agradezco.

Pero también quiero decirles: ¡tengan cuidado de no “volver un museo” su historia, de no “esterilizar” las raíces! La memoria es el órgano del futuro, siempre y cuando las raíces permanezcan vivas y en buen estado. Por eso los animo a transmitir su patrimonio de valores y experiencias a los jóvenes. Se necesitan jóvenes que avancen. ¡Qué hermoso es pensar en un abuelo del Círculo de San Pedro que transmite su experiencia a su nieto! Hay muchos aquí, esto es hermoso. Piensen en cuánta riqueza de fe vivida, de caridad concreta, de amor por los pobres puede pasar a través del ejemplo de un anciano. Y piensen en cuánta energía, cuánta creatividad, cuánto impulso puede dar un joven.

Me viene a la mente el Beato Pier Giorgio Frassati – pronto será santo – que en Turín iba a las casas de los pobres para llevar ayuda. Pier Giorgio era de una familia acomodada, de la alta burguesía, pero no creció “entre algodones”, no se perdió en la “buena vida”, porque en él estaba la savia del Espíritu Santo, estaba el amor a Jesús y a sus hermanos.

Una última cosa quisiera compartir con ustedes. El año que viene será el Año Santo. Roma está llena de obras en construcción; bien, también nos hacen falta. Pero la “obra” que no puede faltar es la de la caridad. Los peregrinos y turistas que vienen a Roma deberían “respirar” el aire de la caridad cristiana, que no es sólo asistencia, es cuidado de la dignidad, es cercanía, es un compartir que se vive, sin publicidad, sin reflectores. Con su presencia, con su cercanía, compasión y ternura, preparen también ustedes la ciudad para el Jubileo, ocupándose no de las calles o de las infraestructuras, sino de los corazones y de la carne de los pobres, que, como dijo San Lorenzo, son el tesoro de la Iglesia.

Queridas hermanas y hermanos, ¡gracias por haber venido! Los encomiendo a la protección de la Salus Populi Romani y los bendigo a todos ustedes y a sus familias. Por favor, no se olviden de orar por mí, ¡orar a favor, se entiende! Gracias.