EL DIÁLOGO ES LA ÚNICA VÍA PARA UNA PAZ JUSTA EN UCRANIA: DECLARACIÓN DEL CARD. PIETRO PAROLIN EN CUMBRE POR LA PAZ EN UCRANIA (17/06/2024)
La Santa Sede recibe con satisfacción la convocatoria a esta Cumbre de Alto Nivel sobre la paz en Ucrania, organizada conjuntamente por Suiza y Ucrania. Es un evento de importancia global, cuidadosamente preparado por Ucrania que, mientras realiza enormes esfuerzos para defenderse de la agresión, también ha trabajado continuamente en el frente diplomático, deseoso de alcanzar una paz justa y duradera.
Ante la guerra y sus trágicas consecuencias, es importante nunca rendirse, pero seguir buscando formas para terminar el conflicto con buenas intenciones, confianza y creatividad. Este el mensaje que el Papa Francisco transmite, particularmente a los líderes de las naciones, con sus continuos llamados por la paz en Ucrania. Es importante reiterar que el único medio capaz de lograr una paz verdadera, estable y justa es el diálogo entre todas las partes involucradas. La Santa Sede expresa su esperanza de que el esfuerzo diplomático actualmente promovido por Ucrania y apoyado por muchos países mejorará, para alcanzar los resultados que merecen las víctimas y el mundo entero está esperando.
De acuerdo con su naturaleza, la Santa Sede está participando como Observado, prestando particular atención al respeto a las leyes internacionales y las cuestiones humanitarias. Con respecto al primer aspecto, desea reafirmar la validez del principio fundamental del respeto a la soberanía de cada país y la integridad de su territorio.
La Santa Sede expresa su gran preocupación por las trágicas consecuencias humanitarias y está especialmente comprometida en facilitar la repatriación de los niños y en impulsar la liberación de prisioneros, especialmente los soldados seriamente heridos y los civiles.
La reunificación de los menores con sus familias o guardianes legales debe ser una preocupación principal para todas la partes y cualquier explotación de su situación es inaceptable. Es, por tanto, imperativo que todos los canales posibles se fortalezcan para facilitar este proceso. Además, la Santa Sede participa como observador en el trabajo de la Coalición Internacional para la repatriación de niños ucranianos desde Rusia. Más aún, mantiene contacto directo con tanto las autoridades ucranianas y rusas con el objetivo de mejorar la efectividad del mecanismo ad hoc creado después de la visita del Card. Matteo Zuppi a Kyiv y Moscú, en vista a resolver casos concretos.
Con respecto a los prisioneros, tanto civiles como militares, existe gran preocupación acerca de los reportes periódicos del no cumplimiento de las Convenciones de Ginebra. En particular, al respecto de la Cuarta Convención, que se refiere de forma más directa a los civiles y a la dificultad en la creación, junto con el Comité Internacional de la Cruz Roja, de una Comisión Médica Conjunta que pueda enfrentar la situación de los prisioneros de guerra en necesidad de cuidado médico urgente. A pesar de los retos, la Santa Sede sigue comprometida en continuar una comunicación regular con las autoridades ucranianas y rusas, y sigue preparada para asistir en la implementación de iniciativas para una mediación potencial que sean aceptables para todas las partes y beneficien a los que han sido afectados. Al mismo tiempo, la Santa Sede anima a países y otros miembros de la comunidad internacional a explorar vías para proveer asistencia y facilitar la mediación, tanto de naturaleza humanitaria como política. Confiamos que, al apoyar estos esfuerzos, podemos ayudad a encontrar consensos y asegurar la implementación oportuna de estos proyectos.
A nombre del Papa Francisco, deseo confirmar su personal cercanía al atormentado pueblo ucraniano y su inquebrantable compromiso por la paz.
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