LLEVAR SIEMPRE EL EVANGELIO AL MUNDO: PALABRAS DEL PAPA A MIEMBROS DEL CAMINO NEOCATECUMENAL (27/06/2022)

Cantos a la Virgen y llantos de recién nacidos en brazos de sus padres se alternaron a lo largo de la audiencia que el Papa Francisco concedió, poco después del mediodía de este 27 de junio en el Aula Pablo VI, a los miembros del Camino Neocatecumenal, durante la cual envió a unas 430 familias a las “zonas más secularizadas y pobres” de Europa y del mundo “para anunciar el amor de Cristo resucitado”, como dijo el iniciador Kiko Argüello: “Dejan sus casas, sus familias, sus amigos y salen a evangelizar”. Compartimos a continuación, las palabras del Papa, traducidas del italiano:

Hemos escuchado la misión de Jesús: “Vayan, den testimonio, prediquen el Evangelio”. Y desde aquel día los apóstoles, los discípulos, toda la gente se fue con la misma fuerza de lo que Jesús les había dado: es la fuerza que viene del Espíritu. “Vayan y prediquen... Bauticen...”.

Pero sabemos que, una vez que hemos bautizado, la comunidad que nace de ese Bautismo es libre, es una nueva Iglesia; y debemos dejarla crecer, ayudarla a crecer con sus propias modalidades, con su propia cultura... Esta es la historia de la evangelización. Todos iguales en cuanto a la fe: creo en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, el Hijo que se encarnó, murió y resucitó por nosotros, el Espíritu que nos ayuda y nos hace crecer: la misma fe. Pero todos con los modos de la propia cultura o de la cultura del lugar donde fue predicada la fe.

Y este trabajo, esta riqueza pluricultural del Evangelio, que nace de la predicación de Jesucristo y se hace cultura, es un poco la historia de la Iglesia: muchas culturas pero el mismo Evangelio. Muchos pueblos, el mismo Jesucristo. Muchas buenas voluntades, el mismo Espíritu. Y a esto estamos llamados: a ir adelante con la fuerza del Espíritu, llevando el Evangelio en el corazón y en las manos. El Evangelio de Jesucristo, no el mío: es de Jesucristo, que se adecua a las distintas culturas, pero es el mismo. La fe crece, la fe se incultura, pero la fe es siempre la misma.

Este espíritu misionero, es decir de dejarse enviar, es una inspiración para todos ustedes. Les agradezco por esto, y les pido docilidad al Espíritu que los envía, docilidad y obediencia a Jesucristo en su Iglesia. Todo en la Iglesia, nada fuera de la Iglesia. Esta es la espiritualidad que debe acompañarnos siempre: predicar a Jesucristo con la fuerza del espíritu en la Iglesia y con la Iglesia. Y el que es la cabeza –decimos – de las distintas Iglesias es el Obispo: siempre vayan adelante con el Obispo, siempre. Es él la cabeza de la Iglesia, en este país, en este estado...

Vayan adelante. ¡Valentía! Gracias por su generosidad. No se olviden de la mirada de Jesús, que ha enviado a cada uno de ustedes a predicar y a obedecer a la iglesia. ¡Muchas gracias!