QUE LAS BUENAS RELACIONES ENTRE COREA Y LA SANTA SEDE SIGAN FLORECIENDO: TELEGRAMA DEL PAPA POR EL 60º ANIVERSARIO DE RELACIONES ENTRE COREA DEL SUR Y EL VATICANO (11/12/2023)

En un telegrama enviado este 11 de diciembre al Obispo de Suwon, el Santo Padre Francisco recuerda su visita de 2014 al país asiático, donde se ha arraigado y vive una Iglesia “floreciente y ferviente”. Con el telegrama enviado a S.E.R. Matthias Ri Iong-Hoon, Presidente de los Obispos católicos coreanos, el Papa recordó los 60 años de relaciones entre el Vaticano y Seúl, ampliando su mirada sobre lo que se ha construido con el “anuncio del Evangelio” y el "crecimiento de la Iglesia local, con su contribución al bienestar de la sociedad coreana”. Publicamos a continuación el texto completo del telegrama, traducido del inglés:

S.E.R. Matthias Ri Iong-Hoon
Obispo de Suwon
Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Corea

Le envío de corazón mis buenos deseos y le aseguro mi cercanía espiritual a usted, a sus hermanos Obispos y a todos los que están reunidos para la Misa especial de conmemoración del sexagésimo aniversario de las relaciones diplomáticas entre la República de Corea y la Santa Sede. Esta significativa celebración es un momento para agradecer a Dios Todopoderoso por las muchas gracias recibidas por la comunidad católica y el pueblo coreano en estas décadas pasadas, y yo mismo me uno con gusto a su gratitud expresada en esta solemne Eucaristía. De manera particular, podemos estar agradecidos por la difusión del Evangelio, por el crecimiento de la Iglesia local y su contribución al bienestar de la sociedad coreana, y confío que esta influencia continuará dando frutos culturales y espirituales, especialmente para los marginados, los empobrecidos y sin esperanza. A este respecto, recuerdo con afecto mi visita a su país en 2014 y la Misa de beatificación de los mártires coreanos quienes por amor a Jesús y por su deseo de extender el Reino de Dios dieron sus vidas en esta tierra y sembraron las semillas de lo que se ha convertido en una Iglesia floreciente y vibrante. La juventud de hoy son los herederos de este gran testimonio de fe y pido para que continúen este valioso testimonio de Cristo mientras preparan la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud que se realizará en 2027. Es también mi esperanza que las buenas relaciones entre la República de Corea y la Santa Sede continuarán floreciendo mientras trabajamos juntos en asuntos de interés común, especialmente la paz y la reconciliación en la península coreana. Con estos sentimientos, los encomiendo a todos ustedes a la intercesión de los mártires coreanos y de María, Madre de la Iglesia, y con gusto imparto mi Bendición como prenda de gracia y paz en el Señor Jesucristo.

FRANCISCO

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