EN EL CAMPO DE LA SALUD, ES ESENCIAL LA INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA CENTRADA EN LA PERSONA: PALABRAS DEL PAPA A DELEGACIÓN DEL HOSPITAL FRANCESCO MIULLI (18/12/2023)

A la delegación del Hospital Francesco Miulli de Acquaviva delle Fonti, en la Provincia de Bari, recibida la mañana de este 18 de diciembre en la Sala del Consistorio del Palacio Apostólico, el Papa Francisco explicó que es precisamente esa atención primaria reservada a los enfermos que caracteriza al Miulli, la que refleja la invitación de Jesús a cuidar del prójimo: “Todo lo que hicieron a uno solo de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicieron”. Compartimos a continuación el texto completo de su mensaje, traducido al español:

Excelencia, señoras y señores, ¡buenos días!

Les doy la bienvenida y les agradezco esta visita, que me permite encontrarme con la comunidad de trabajo del Hospital “Francesco Miulli” de Acquaviva delle Fonti. Se trata de un Entidad Eclesiástica, y esto interpela aún más nuestra responsabilidad como Iglesia. De hecho, es un lugar que combina la inspiración cristiana con el profesionalismo y la innovación clínica y tecnológica. Quisiera detenerme en dos aspectos esenciales de su obra: poner a la persona en el centro y promover la investigación científica.

Primero: poner a la persona en el centro. El suyo es un hospital antiquísimo, fundado hace nueve siglos, como “hospital para los pobres enfermos”, es decir, como lugar acogedor y seguro donde los que sufren puedan encontrar refugio y ayuda. Y ustedes tratan de ser fieles al compromiso de quienes los han precedido, al continuar poniendo en el centro de su obra a “los pobres enfermos”, y en ellos a Jesús, que nos dijo: «Todo lo que hicieron a uno solo de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicieron» (cf. Mt 25, 40).

Esto les ha convertido en una realidad dinámica y en constante crecimiento, como atestigua la forma en que actualizan constantemente tanto los cuidados como las instalaciones, con el fin de ofrecer el servicio más completo posible a los pacientes. En efecto, la nueva sede del Hospital les permite ofrecer a los pacientes más de 600 camas, con quirófanos y unidades operativas, en las que trabajan con profesionalismo y abnegación más de mil empleados. He apreciado la apertura, dentro de las instalaciones, de un Ambulatorio para inmigrantes – realizado en colaboración con Cáritas Diocesana –, que cuenta con los servicios voluntarios de todo el personal médico y de enfermería. Esto es muy hermoso y da testimonio del espíritu con el que llevan a cabo su servicio. Con todo esto, se puede decir que el “Miulli” es un recurso valioso para su territorio y también a nivel nacional.

Y llegamos al segundo punto: promover la investigación científica. Ya desde hace décadas están comprometidos también en esto, en colaboración con numerosas Universidades italianas. Desde hace dos años, sin embargo, con la acreditación del Ministerio de Universidades e Investigación, el “Miulli” se ha convertido en Policlínico Universitario y ha activado el Curso de Licenciatura de Ciclo Único en Medicina y Cirugía. Se trata de un objetivo de gran valor que permite, por un lado a los trabajadores de la salud presentes, prestar un servicio reconocido tanto en el ámbito académico como en el asistencial en su propio territorio y, por otro, también da la oportunidad a las mejores inteligencias locales de no emigrar – la emigración es un problema que empobrece los territorios, y lo sabemos –; más aún, puede animar a otros profesionales de alto nivel a venir a trabajar en Italia, en un enriquecedor intercambio de capacidades a largo plazo.

Queridos amigos, el Hospital “Francesco Miulli” puede favorecer un círculo virtuoso para una asistencia en la salud cada vez mejor, en beneficio de la comunidad y de los pacientes, considerando importante al mismo tiempo la calidad del servicio y la atención a las personas. Les agradezco por lo que hacen y los animo a continuar con entusiasmo en este camino. ¡De corazón los bendigo, a ustedes y a su trabajo, y les deseo una feliz Navidad! Les pido: no se olviden de orar por mí. Gracias.

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