CRISTIANOS E HINDÚES, UNIDOS EN UN MUNDO DIVIDIDO Y EN LUCHA: MENSAJE DEL DICASTERIO PARA EL DIÁLOGO INTERRELIGIOSO CON MOTIVO DE LA FIESTA HINDÚ DEL DEEPAVALI (17/10/2022)

La capacidad de las distintas confesiones de dar testimonio de comprensión y sentido de fraternidad resulta vital y, en particular, haciendo hincapié en los aspectos de la “convivialidad y de la “corresponsabilidad son los valores en que el Dicasterio para el Diálogo Interreligioso centra el mensaje firmado por el Prefecto, el Cardenal Ayuso Guixot, y por el Secretario, Mons. Kodithuwakku Kankanamalage, enviado como es habitual cada año a las comunidades hindúes con motivo de la fiesta anual de Deepavali, la “fiesta de la luz”, que en 2022 cae el 24 de octubre. Transcribimos a continuación, el texto del mensaje, traducido del italiano:

Cristianos e hindúes:
promovamos juntos la convivialidad
y la corresponsabilidad

Queridos amigos hindúes:

El Dicasterio para el Diálogo Interreligioso, hasta ahora conocido como Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, les extiende sus gozosos saludos y mejores deseos en ocasión del Deepavali, que este año se celebra el 24 de octubre. Que esta fiesta de las luces pueda darles la gracia y la felicidad de reavivar no solo sus vidas, sino las de cada individuo en sus familias y comunidades y en sentido amplio en la sociedad.

Crecientes tensiones, conflictos y violencia en diversas partes del mundo con base en las identidades y supremacías religiosa, cultural, étnica, racial y lingüística – a menudo alimentadas desde políticas de confrontación, populistas y expansionistas, pero también desde movimientos de mayoría y minoría y por un uso descarado de las redes sociales – son causa de preocupación para todos nosotros, porque impactan fuertemente la fraterna y pacífica coexistencia social. En este contexto, es vital y central la necesidad de promover la convivialidad y un espíritu de corresponsabilidad entre las personas. Siguiendo nuestra querida tradición, queremos compartir con ustedes en esta ocasión algún pensamiento sobre cómo nosotros, cristianos e hindúes, podemos promover juntos la convivialidad y la corresponsabilidad para el bien de cada uno y de todos.

La convivialidad es tanto la cualidad de ser amigable y vivaz como la capacidad de vivir en medio de los demás con sus individualidades, diversidades y diferencias en un espíritu de respeto, amor y confianza. Es el acto y el arte de forjar, por un lado, relaciones amigables y fraternas, sanas y armoniosas, entre los seres humanos y entre éstos y la naturaleza, por el otro. Ésta se construye cotidianamente, a través de encuentros personales y diálogo, escucha recíproca y comprensión, paciencia y perseverancia, con la convicción de que “la vida subsiste donde hay vínculos, comunión, fraternidad” (Papa Francisco, Encíclica Fratelli Tutti – sobre la fraternidad y la amistad social, 2020, n. 87).

Por otro lado, la promoción de la convivialidad implica por nuestra parte la Asunción de responsabilidades recíprocas y por la creación. Ella exige una disponibilidad para caminar y trabajar juntos con caridad, fraternidad y sentido de corresponsabilidad por el bien común. Además de contribuir, nosotros en primer término, responsablemente como podamos al bien común, es necesario que hagamos responsables a las personas que nos rodean al realizar la convivialidad mediante el respeto de la dignidad trascendental de toda persona humana y de sus legítimos derechos que de ella surgen, con el fin de trabajar para el bienestar social y el desarrollo sustentable de todos y comprometiéndose a vivir en armonía con cada uno y con la naturaleza. Por el camino hacia la convivialidad, debemos enfrentar muchos desafíos debido a la prevalencia de la indiferencia y del individualismo dominantes en nuestra sociedad actual y, como creyentes, no debemos ceder al pesimismo sino en cambio estar unidos y actuar como ejemplo para los demás.

Como las familias, con el ejemplo de los padres y los ancianos, desarrollan un papel clave al imprimir en sus hijos y en los más jóvenes los nobles valores de la convivialidad y corresponsabilidad, también la familia de los responsables religiosos y de los grupos de todas las religiones a través del planeta, las instituciones educativas, los medios de comunicación, las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, comparten igualmente la responsabilidad de cultivar los valores de la convivialidad y corresponsabilidad con todos los medios a su disposición. El diálogo interreligioso, entonces, que según el Papa Francisco es “un signo providencial” de nuestros tiempos y “un camino privilegiado para el crecimiento de la fraternidad y la paz en el mundo” (Saludos a los Delegados del International Jewish Committee on Interreligious Consultations, 30 de junio 2022), constituye sin duda un instrumento poderoso para inspirar e impulsar a personas de distintas tradiciones religiosas a vivir estos valores en fraternidad, unidad y solidaridad para el bien común.

Como creyentes y responsables de nuestras comunidades religiosas estamos enraizados en nuestras respectivas creencias y convicciones religiosas y compartimos una común preocupación y responsabilidad por el bienestar de la familia humana y de la tierra, nuestra casa común. Como tales, nosotros podemos, cristianos e hindúes, unir nuestros esfuerzos con las personas de todas las demás tradiciones religiosas y con aquellas de buena voluntad, para promover, individual y colectivamente, el espíritu de convivialidad y corresponsabilidad para transformar este mundo en una morada segura para todos donde vivir gozosamente en paz.

¡Les deseamos un feliz Deepavali!

Card. Miguel Ángel Ayuso Guixot, MCCJ
Prefecto

Mons. Indunil Janakaratne Kodithuwakku Kankanamalage
Secretario

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