JUNTOS TRABAJAMOS POR LOS RETOS DE HOY: CARTA DEL PAPA AL PATRIARCA ECUMÉNICO BARTOLOMÉ I (22/10/2021)
A Su Santidad Bartolomé
Arzobispo de Constantinopla
Patriarca Ecuménico
«Gracia a vosotros y paz de parte de Aquel que es, que era y que vendrá» (Ap 1, 4)
Queridísimo hermano en Cristo:
En la feliz ocasión del 30º aniversario de su elección como Arzobispo de Constantinopla y patriarca ecuménico, le expreso mis fervientes deseos: Χρόνια πολλά! Ad multos annos!
Me uno a usted en la acción de gracias al Señor por las muchas bendiciones derramadas en su vida y en su ministerio en estos años, y ruego a Dios, de quien todos los dones provienen, para que le conceda salud, alegría espiritual y gracia abundante para sostener todos los aspectos de su alto servicio.
Es con gratitud a Dios, reflexiono sobre nuestro profundo vínculo personal, desde el tiempo de la inauguración de mi ministerio papal, cuando me honró con su presencia en Roma. Con el tiempo, este vínculo se ha convertido en una amistad fraterna alimentada en muchos encuentros no sólo en Roma, sino también en El Fanar, en Jerusalén, Asís, El Cairo, Lesbos, Bari y Budapest. Como se manifestó claramente, una vez más, con su participación en eventos celebrados recientemente en Roma, donde su presencia ha sido particularmente apreciada, comparto con usted la comprensión de nuestra común responsabilidad pastoral ante los urgentes desafíos que toda la familia humana está enfrentando hoy.
En particular, le aseguro mi reconocimiento por su compromiso con la salvaguarda de la creación y por su reflexión sobre este tema, del que he aprendido y sigo aprendiendo mucho. Con el estallido de la pandemia y las consecuentes graves repercusiones sanitarias, sociales y económicas, su testimonio y enseñanza sobre la necesidad de la conversión espiritual de la humanidad han adquirido una relevancia duradera.
Además, le agradezco sinceramente por haber indicado constantemente el camino del diálogo, en caridad y en verdad, como la única vía posible para la reconciliación entre los creyentes en Cristo y para el restablecimiento de su plena comunión. Con la ayuda de Dios, éste es el sendero a lo largo del cual seguramente seguiremos caminando juntos, pues la cercanía y la solidaridad entre nuestras Iglesias son una contribución indispensable a la fraternidad universal y a la justicia social, de las que la humanidad tiene urgente necesidad.
Con sentimientos de profundo afecto fraterno, intercambio con usted, Santidad, un abrazo fraterno en el amor del Señor Jesucristo.
Roma, San Juan de Letrán, 22 de octubre de 2021
Francisco
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