LA SANTA SEDE TRABAJARÁ PARA QUE LOS NIÑOS UCRANIANOS LLEVADOS A RUSIA SEAN DEVUELTOS: CONFERENCIA DE PRENSA DEL PAPA EN EL VUELO DE REGRESO DESDE HUNGRÍA (30/04/2023)

Los esfuerzos de la Santa Sede para facilitar el regreso a casa de los niños ucranianos llevados a Rusia durante la guerra, la paz, los contactos con el Kremlin y el diálogo ecuménico, con una mención a su salud tras ser ingresado en el Gemelli la semana anterior al Domingo de Ramos. También la restitución de los restos del Partenón a Grecia, un ejemplo para futuros gestos similares. Estos fueron los temas abordados por el Papa Francisco este 30 de abril en el breve diálogo durante el vuelo de regreso a Roma desde Budapest, que transcribimos a continuación, traducido del italiano:

Matteo Bruni

Buenas tardes, Santidad, gracias por sus palabras en estos días en los muchos encuentros con distintas partes de la sociedad húngara, un poco en continuidad con los encuentros que ocurrieron en septiembre de 2021; y gracias también por esta ocasión para seguir hablando del viaje con usted. Muchas gracias.

Papa Francisco

Buenas tardes y gracias a ustedes por su trabajo, por su compañía. Han sido tres días intensos pero buenos. Ahora ustedes tienen la palabra.

Matteo Bruni

Entonces, la primera pregunta es de un periodista húngaro, Antal Hubai de la televisión húngara.

Antal Hubai – Rtl Klub

Buen día, sabemos que usted, Santo Padre, ha tenido distintas experiencias personales con los húngaros en el curso de su vida. ¿Ha cambiado, y si es así, cómo, su visión después de los encuentros vividos ahora en Hungría?

Sí, realmente tuve una experiencia en los años 60 cuando estudiaba en Chile, muchos jesuitas húngaros, tuvieron que ir allí porque los corrieron de Hungría. Luego fui muy amigo de las monjas húngaras de María Ward, que tenían una escuela a 20 km de Buenos Aires. Las visitaba dos veces por mes y hacía un poco de capellán extraordinario. Luego también con una asociación de laicos húngaros de Buenos Aires que trabajaban en el internado húngaro, los conocí bastante bien. No entendía el idioma, pero sí dos palabras: ¡goulash y tokaj! Fue una linda experiencia y me conmovió mucho el dolor de ser refugiado, de no poder volver a casa; y las hermanas de María Ward que se quedaron allí estaban escondidas en apartamentos para que el régimen no se las llevara. Luego supe más sobre todo el asunto de convencer al buen Cardenal Mindszenty para que viniera a Roma. También conocí el entusiasmo del 56 y la decepción posterior. Más o menos esto.

Matteo Bruni

¿Ha cambiado su opinión sobre los húngaros después de estos dos breves viajes?

Papa Francisco

No, no ha cambiado. Quizá se ha enriquecido, enriquecido en el sentido de que los húngaros que he conocido tienen una gran cultura, una gran cultura; también aquellos que no eran de clase social alta, también los sencillos tenían una cultura base muy elevada. Hablaban normalmente alemán o inglés, porque el húngaro no se habla fuera de Hungría… Sólo en el Paraíso se habla, porque dicen que se necesita una eternidad para aprender el húngaro (risas)... No ha cambiado, al contrario: vi el estilo que conocía.

Matteo Bruni

La segunda pregunta es de Eliana Ruggiero de AGI

Eliana Ruggiero – AGI

Santo Padre, usted lanzó un llamado para abrir – reabrir – las puertas de nuestro egoísmo a los pobres, a los migrantes, a los que no están en regla. En su encuentro con el Primer Ministro húngaro Orbán, ¿le pidió que reabriera las fronteras de la ruta de los Balcanes que ha cerrado? Luego, en los últimos días, también se encontró con el Metropolita Hilarión: ¿pueden Hilarión y el propio Orbán convertirse en canales de apertura hacia Moscú para acelerar un proceso de paz para Ucrania, o hacer posible una reunión entre usted y el Presidente Putin? Gracias.

Papa Francisco

Creo que la paz se hace siempre abriendo canales, nunca se puede hacer la paz cerrándose. Invito a todos a abrir relaciones, canales de amistad. Esto no es fácil. El mismo discurso que he hecho en general, lo he hecho con Orbán y lo he hecho un poco en todas partes.

Sobre la migración: creo que es un problema que Europa debe tomar en sus manos, porque hay cinco países que son los que más sufren: Chipre, Grecia, Malta, Italia, España, porque son los países mediterráneos y la mayoría desembarca allí. Y si Europa no se hace cargo de esto, de una distribución justa de los migrantes, el problema sólo será de estos países. Creo que Europa debe hacer sentir a la gente que es “Unión Europea” también frente a esto.

Hay otro problema que está relacionado con la migración, y es la tasa de natalidad. Hay países como Italia y España donde se tienen pocos hijos. El año pasado hablé de esto en un encuentro de familias y últimamente he visto que el gobierno [italiano] y otros gobiernos hablan de ello. La media de edad en Italia es de 46 años, en España es más alta todavía y hay pequeños pueblos desiertos. Un programa migratorio, pero bien llevado con el modelo que algunos países han tenido con la migración – pienso por ejemplo en Suecia en la época de las dictaduras latinoamericanas –, puede ayudar también a estos países que tienen una baja natalidad.

Entonces, finalmente, Hilarión. Hilarión es alguien a quien respeto mucho, y siempre hemos tenido una buena relación. Y él tuvo la cortesía de venir a verme, después fue a la Misa, y también le vi aquí, en el aeropuerto. Hilarión es una persona inteligente con la que se puede hablar, y estas relaciones hay que mantenerlas, porque si hablamos de ecumenismo y después decimos “esto me gusta, esto no me gusta”... Debemos tener la mano tendida con todos, y también recibir la mano de los demás. Con el Patriarca Kirill hablé sólo una vez desde el momento que empezó la guerra, 40 minutos por ZOOM, luego a través de Antonio, que está en el lugar de Hilarión, ahora, y que viene a verme: es un Obispo que fue párroco en Roma y conoce bien el ambiente, y siempre a través de él estoy en conexión con Kirill. Está en pausa el encuentro que íbamos a tener en Jerusalén en julio o junio del año pasado, pero a causa de la guerra se suspendió: habrá que hacerlo. Y luego, con los rusos tengo una buena relación con el Embajador que ahora se va, Embajador desde hace siete años en el Vaticano, es un gran hombre, un hombre comme il faut. Una persona seria, culta, muy equilibrado… La relación con los rusos es principalmente con este Embajador. No sé si lo he dicho todo…

Eliana Ruggiero

¿Podrían de alguna manera Hilarión y también Orbán acelerar el proceso de paz en Ucrania y también hacer posible un encuentro entre usted y Putin?, ¿Pueden actuar – entre comillas – como intermediarios?

Papa Francisco

Usted puede imaginarse que en este encuentro no sólo hablamos de Caperucita Roja, hablamos de todas estas cosas. Se habla de esto porque a todos nos interesa el camino de la paz. Yo estoy dispuesto, estoy dispuesto a hacer todo lo que haya que hacer. También ahora está en curso una misión, pero aún no es pública, veremos... Cuando sea pública hablaré de ella.

Matteo Bruni

La tercera pregunta es de Aura María Vistas Miguel, que está aquí a su izquierda.

Aura María Vistas Miguel – Radio Renascença – Portugal

Santidad, la próxima etapa es Lisboa, así que dos cosas. ¿Cómo se encuentra de salud? Porque nos tomó por sorpresa cuando fue al hospital, hay quien dijo que se desmayó, entonces ¿se siente con energía para encontrar a miles de jóvenes en esos días de agosto en Lisboa? Y a la JMJ ¿le gustaría invitar a un joven ucraniano y a un joven ruso como signo también para las nuevas generaciones?

Papa Francisco

Primero que nada la salud. Lo que tuve fue un fuerte malestar al final de la Audiencia del miércoles. No tenía ganas de comer, me acosté un poco. No perdí el conocimiento, pero había una fiebre alta y a las tres de la tarde el médico me llevó inmediatamente al hospital: una neumonía aguda y fuerte, en la parte inferior del pulmón. Gracias a Dios lo puedo contar, porque el organismo, el cuerpo, respondió bien al tratamiento. Gracias a Dios. Esto es lo que tuve.

Después Lisboa: el día antes de partir hablé con Monseñor Américo [Américo Manuel Alves Aguiar, Obispo auxiliar de Lisboa y Presidente de la Fundación JMJ 2023] que vino a ver un poco cómo están las cosas… Sí iré, iré, y espero lograrlo. Ustedes ven que no es lo mismo que hace dos años, pero con el bastón… Ahora está mejor, de momento no he cancelado el viaje. Luego está el viaje a Marsella, luego está el viaje a Mongolia, luego está un último que no recuerdo a dónde... Todavía el programa me hace moverme, veremos.

Aura María Vistas Miguel

¿Y el encuentro con dos jóvenes quizá de Rusia y Ucrania?

Papa Francisco

Américo tiene algo en mente, está preparando algo, me dijo… Lo está preparando bien.

Matteo Bruni

La cuarta pregunta es de Nicole Winfield, Santidad, y después con los tiempos logramos…

Nicole Winfield – Associated Press

Santo Padre, yo quería preguntarle algo un poco diferente. Recientemente hizo usted un gesto ecuménico muy fuerte, entregó a Grecia tres fragmentos de las esculturas del Partenón, por parte de los Museos Vaticanos. Este gesto tuvo también eco fuera del mundo ortodoxo, porque muchos museos de Occidente están discutiendo precisamente la restitución de objetos adquiridos durante el periodo colonial, como un acto de justicia hacia estás personas. Quería preguntarle si usted está dispuesto a otros gestos de restitución. Pienso por ejemplo en los pueblos y grupos indígenas de Canadá que han solicitado la devolución de objetos de las colecciones vaticanas, como parte del proceso de reparación por los daños sufridos durante el período colonial.

Papa Francisco

Esto, ante todo, es el séptimo mandamiento: si has robado, debes restituir. Pero hay toda una historia. A veces las guerras y la colonización llevan a tomar estas decisiones de tomar lo bueno de los demás. Este fue un gesto justo, había que hacerlo: el Partenón, entregar algo. Y si mañana vienen los egipcios a pedir el obelisco, ¿qué haremos? Ahí hay que hacer un discernimiento, en cualquier caso. Y luego la restitución de cosas indígenas: está en marcha, con Canadá, al menos estábamos de acuerdo en hacerlo. Ahora preguntaré cómo va. Pero la experiencia con los aborígenes en Canadá ha sido muy fructífera. Incluso en Estados Unidos los jesuitas están haciendo algo, con ese grupo de indígenas dentro de Estados Unidos, el Padre General me contó el otro día… Pero volvamos a la restitución. En la medida en que se puede restituir, que es un gesto necesario, es mejor hacerlo. A veces no se puede, no hay posibilidad política, o posibilidad real, concreta. Pero en la medida en que se puede restituir, que se haga, por favor, esto le hace bien todos. Para no acostumbrarse a meter la mano en el bolsillo de los demás.

Matteo Bruni

Entonces, hacemos todavía una última pregunta: Eva Fernández de Radio Cope, que está aquí…

Eva Fernández – Radio COPE

El Primer Ministro ucraniano le pidió su ayuda para traer de vuelta a los niños, llevados a la fuerza a Rusia, ¿piensa que podrá ayudarlo?

Papa Francisco

Pienso que sí, porque la Santa Sede ha actuado como intermediaria en algunas situaciones de intercambio de prisioneros, y a través de la Embajada salió bien. Creo que esta también puede salir bien. Es importante, al menos la Santa Sede está dispuesta a hacerlo porque es justo, es algo justo y debemos ayudar, ayudar para que esto no sea un casus belli, sino un caso humano. Es un problema de humanidad antes que un botín de guerra o de un “cambio” de guerra. Todos los gestos humanos ayudan, en cambio los gestos de crueldad no ayudan. Debemos hacer todo lo humanamente posible.

Pienso también, y quiero decirlo, en las mujeres que vienen a nuestros países: Italia, España, Polonia, Hungría, tantas mujeres que vienen con hijos, y los maridos o están muertos o están luchando en la guerra. Es verdad, hay entusiasmo y en este momento se les está ayudando; pero no debemos perder el entusiasmo de hacerlo, porque, cuando decae el entusiasmo, estas mujeres se quedan sin protección, con el peligro de caer en manos de los buitres que dan vueltas siempre buscando... Tengamos cuidado de no perder esta atención de ayuda que tenemos por los refugiados. Y esto hacerlo todos. Gracias.

Gracias a ustedes. ¡Buena cena! Pero no sé si es cena o algo para engañar al estómago. Muchas gracias por su trabajo.

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