UNIR LA ALTURA DEL PENSAMIENTO A LA HUMILDAD DE CORAZÓN: MENSAJE DEL PAPA A PARTICIPANTES EN CONGRESO TEOLÓGICO (21/09/21)

Desde este 21 de septiembre y hasta el viernes 24 tiene lugar en la Pontificia Universidad Lateranense un Congreso Teológico Internacional, en el marco de las Celebraciones Jubilares del Tercer Centenario de la Fundación de la Congregación Pasionista, bajo el tema “La sabiduría de la cruz en un mundo plural”, con el objetivo de profundizar en la actualidad de la Cruz en el contexto de los múltiples areópagos contemporáneos. A los participantes, y recordando estas premisas, se dirigió el Papa Francisco en un mensaje, fechado el pasado 1º. de julio, al Superior General de la Congregación de la Pasión de Jesucristo, el Padre Joachin Rego C.P. El Papa Francisco manifiesta la esperanza de que la iniciativa contribuya a “una lectura renovada de los desafíos contemporáneos a la luz de la Sabiduría de la Cruz”. Transcribimos a continuación el mensaje del Santo Padre, traducido del italiano:

Al Rvdo. Padre Joachim Rego C.P.

Superior General de la Congregación de la Pasión de Jesucristo

Dirijo un cordial saludo a los participantes en el Congreso Teológico Internacional, que tendrá lugar en la Pontificia Universidad Lateranense del 21 al 24 de septiembre próximo, sobre el tema “La Sabiduría de la Cruz en un mundo plural”. Este Congreso se sitúa en el contexto de las Celebraciones Jubilares por el Tercer Centenario de la Fundación de la Congregación Pasionista y se propone profundizar en la actualidad de la Cruz en el contexto de los múltiples areópagos contemporáneos. Responde, en tal sentido, al deseo de San Pablo de la Cruz de esforzarse para que el Misterio Pascual, centro de la fe cristiana y del carisma de la Familia Religiosa Pasionista, sea irradiado y difundido, en respuesta a la Caridad divina y para salir al encuentro de las expectativas y esperanzas del mundo.

El Apóstol Pablo habla de la amplitud, la longitud, la altura y la profundidad del amor de Cristo (cf. Ef 3, 18). Contemplando al Crucificado, vemos toda dimensión humana abrazada por la misericordia de Dios. Su amor kenótico y compasivo toca, a través de la Cruz, los cuatro puntos cardinales y alcanza los extremos de nuestra condición, uniendo inseparablemente la relación vertical con Dios y la horizontal con los hombres, en una fraternidad que la muerte de Jesús hizo definitivamente universal.

El inmenso poder salvífico que se libera de la debilidad de la Cruz indica a la teología la importancia de un estilo que sepa unir la altura del pensamiento con la humildad del corazón. Frente al Crucificado, también es invitada a dirigirse a la condición más frágil y concreta del hombre y a renunciar a modalidades e intentos polémicos, compartiendo con ánimo alegre el esfuerzo del estudio y buscando con confianza las preciosas semillas que el Verbo siembra en pluralidad discontinua y a veces contradictoria de la cultura.

La Cruz del Señor, fuente de salvación para los hombres de todo lugar y todo tiempo, es por eso actual y eficaz, también y sobre todo, en una situación como la contemporánea, caracterizada por cambios rápidos y complejos. Muy oportunamente, entonces, el Congreso Teológico se propone hacer conocer la Sapientia Crucis en diversos ámbitos –como los desafíos de las culturas, la promoción del humanismo y el diálogo interreligioso y los nuevos escenarios de la Evangelización–, asociando a la reflexión científica una serie de manifestaciones que dan testimonio de su incidencia benéfica en diversos contextos.

Espero, por tanto, que la iniciativa, al promover fructíferos diálogos teológicos, culturales y pastorales, contribuya a una lectura renovada de los desafíos contemporáneos a la luz de la Sabiduría de la Cruz, para favorecer una evangelización fiel al estilo de Dios y cercana al hombre. Al formular cordiales deseos para las jornadas de estudio, invoco la protección de la Santísima Virgen y de San Pablo de la Cruz, e de corazón imparto a los relatores, organizadores y a cuantos participan en esta importante Asamblea, la Bendición Apostólica, pidiendo a todos que continúen orando por mí.

Roma, San Juan de Letrán, 1° de julio de 2021

Francisco

Comentarios