CUSTODIEN LA IDENTIDAD CRISTIANA: HOMILÍA DEL PAPA EN LA MISA DE LA FIESTA DEL BAUTISMO DEL SEÑOR (09/01/2022)

Este 9 de enero, la Iglesia celebra la Fiesta del Bautismo del Señor y, tras la pausa del año pasado, debido a la pandemia, el Papa Francisco retomó la costumbre de impartir, en este domingo, el Bautismo a algunos hijos recién nacidos de empleados del Vaticano. En esta ocasión, dieciséis niños y niñas recibieron el Sacramento de manos del Papa, que les introduce en la vida cristiana en un contexto muy especial: la Capilla Sixtina, que resonó con las voces de los pequeños mientras el Papa hablaba brevemente en un ambiente de celebración y gran emoción. “Este es su trabajo durante su vida: custodiar la identidad cristiana de sus hijos”, dijo el Papa Francisco en su breve homilía a los padres de los recién bautizados. Reproducimos a continuación, el texto improvisado por el Santo Padre, traducido del italiano:

Hoy conmemoramos el Bautismo del Señor. Hay un himno litúrgico muy hermoso, en la fiesta de hoy, que dice que el pueblo de Israel iba al Jordán “con los pies descalzos y el alma descalza”, es decir un alma que deseaba ser bañada por Dios, que no tenía riqueza alguna, que tenía necesidad de Dios. Estos niños hoy vienen aquí también con “el alma descalza” a recibir la justificación de Dios, la fuerza de Jesús, la fuerza de seguir adelante en la vida. Vienen a recibir la identidad cristiana. Es esto, sencillamente. Sus hijos recibirán hoy la identidad cristiana. Y ustedes, padres y padrinos, deben custodiar esta identidad. Esta es su tarea durante su vida: custodiar la identidad cristiana de sus hijos. Es un compromiso de todos los días: hacerlos crecer con la luz que hoy recibirán. Solamente esto quiero decirles, este es el mensaje de hoy: custodiar la identidad cristiana que han traído hoy para hacer que la reciban sus hijos.

Esta celebración es un poco larga, los niños después se sienten extraños aquí en un ambiente que no conocen. Por favor, ellos son los protagonistas: hagan lo posible para que no tengan mucho calor, que se sientan a gusto... Y si tienen hambre, amamántenlos tranquilamente aquí, frente al Señor, no hay problema. Y si gritan, déjenlos gritar, porque tienen un espíritu de comunidad, digamos un “espíritu de banda”, un espíritu de conjunto, y basta con que uno comience – porque todos son musicales – ¡y de inmediato viene la orquesta! Déjenlos llorar tranquilos, que se sientan libres. Pero que no sientan demasiado calor y, si tienen hambre, que no se queden con hambre.

Y así, con esta paz, sigamos con la ceremonia. Y no lo olviden: recibirán la identidad cristiana y su tarea será custodiar esta identidad cristiana. Gracias.