UNA ECONOMÍA GLOBAL MÁS JUSTA Y HUMANA: PALABRAS DEL PAPA A LOS MIEMBROS DE LA UNIÓN DE FERIAS INTERNACIONALES (06/02/2020)

El Papa Francisco recibió este 6 de febrero al mediodía, en la Sala Clementina, a los participantes de la Cumbre de la Unión de Ferias Internacionales (UFI), resaltando su contribución a “una economía global más justa y humana” y al mismo tiempo subrayó, cómo en este mundo cada vez más “cercano”, “crecen las posibilidades de interrelación y cooperación entre los individuos y a través de las actividades que estos realizan”. Les invitó también a “promover la inclusión, el cuidado del hogar común y el desarrollo integral de las personas y los pueblos”. Transcribimos a continuación el texto completo de su discurso, traducido del italiano:

Queridos amigos:

Les doy la bienvenida en ocasión de su Cumbre mundial. Este encuentro se está llevando a cabo en Roma, ciudad de fe y cultura, lugar de encuentro de pueblos e ideas a través de los siglos. Como líderes en el sector de las ferias y de las grandes exposiciones comerciales, se han reunido aquí no sólo como profesionales de la organización, sino porque buscan mediante su trabajo contribuir a una economía global más justa y humana.

En nuestro mundo cada vez más “cercano”, nos hacemos cada vez más conscientes de que los distintos aspectos de nuestra vida y de nuestras actividades – incluidas las sociales, culturales y ecológicas – están estrechamente relacionadas entre ellas (cf. Enc. Laudato si’, 137). Este interconexión ha inspirado, en el ámbito empresarial, el establecimiento de convenios ambientales, sociales y de gobierno que puedan guiar y valorar el impacto general de las actividades económicas y comerciales. En el caso de su campo profesional, se encontró que las ferias y exposiciones no sólo tienen efectos positivos en las economías regionales y en los mercados de trabajo, sino que ofrecen también oportunidades significativas para mostrar al mundo entero la rica diversidad y belleza de las culturas y ecosistemas locales.

De manera particular, las exposiciones internacionales contribuyen al crecimiento de una cultura del encuentro, que refuerza los lazos de solidaridad y favorece el enriquecimiento recíproco entre los miembros de la familia humana (cf. Exhort. ap. Evangelii gaudium, 220). Su trabajo tiene entonces una dimensión que lo trasciende. Como servicio al bien común, debería promover la inclusión, el cuidado de la casa común y el desarrollo integral de individuos y pueblos. Estas preocupaciones éticas no son secundarias, sino esenciales para construir una economía en que los rendimientos financieros no representen la única variable para medir el éxito.

La experiencia les ha enseñado que, en la preparación y realización de las ferias, todos los elementos constitutivos deben coincidir de manera armónica, desde los actores humanos a los materiales de construcción y la iluminación, desde las plantas hasta el manejo de residuos. Cuanto mayor es la cooperación a nivel local e internacional, aumentan las posibilidades de éxito, ya sea en el plano económico o en el humano. Las ferias que sostienen la economía del territorio, involucran a su fuerza de trabajo, dan valor y relevancia a su cultura y respetan escrupulosamente su ecología humana y ambiental, finalmente tendrán más éxito y renombre. Tendrán un impacto positivo y un atractivo tanto localmente como globalmente.

Por la naturaleza misma de una exposición a gran escala, es necesaria una compleja red de trabajadores, que recurre a una vasta gama de organizadores, autoridades locales, trabajadores, industrias comerciales, entidades civiles y así sucesivamente. No obstante las muchas dificultades que puedan surgir en el curso de la preparación y realización de las ferias y las exposiciones que entran en su competencia específica, estos eventos son capaces de crear una red de buenas relaciones humanas, capaces de durar más allá del evento mismo. Ustedes pueden estar justamente orgullosos de sus iniciativas, cuando generan una más solida conciencia al servicio del bien común y del desarrollo integral.

Queridos amigos, les ofrezco mis mejores deseos para su trabajo con el fin de promover la creatividad y la innovación en su sector. Invoco la bendición de Dios sobre sus trabajos de estos días, sobre cada uno de ustedes y sus familias. Hago oración por ustedes. Que Dios los bendiga a todos. Y por favor les pido orar por mí. Gracias.

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