TRABAJAR POR LA PAZ COMPROMETIDOS CON LOS QUE NO TIENEN VOZ: VIDEO MENSAJE DEL PAPA AL PUEBLO DE BANGLADESH EN SU 50MO. ANIVERSARIO DE INDEPENDENCIA (24/03/2021)
“Los animo a cada uno de ustedes, especialmente a la generación más joven, a renovar sus esfuerzos para trabajar por la paz y la prosperidad de la noble nación que representan. Y les pido a todos ustedes que continúen con su compromiso de generosidad y ayuda humanitaria a los refugiados, los más pobres, los desfavorecidos y los que no tienen voz”. Así lo afirmó el Papa Francisco en un video mensaje dirigido al “amado pueblo de Bangladesh”, con ocasión del centenario del nacimiento del jeque Mujibur Rahman y el quincuagésimo aniversario de la independencia de este país asiático, conocido como la “Bengala de oro”. Reproducimos a continuación, el texto de su mensaje, traducido del italiano:
Me complace tener la oportunidad de transmitir mis más cordiales saludos y mis mejores deseos al presidente, al primer ministro y al querido pueblo de Bangladesh, cuando la nación celebra el centenario del nacimiento del jeque Mujibur Rahman y el cincuenta aniversario de la independencia de Bangladesh. Me uno a todos ustedes para dar gracias a Dios por las muchas bendiciones concedidas a su país durante estos años.
Bangladesh —“Bengala de oro” (Sonar Bangla)— es un país de rara belleza natural y una nación moderna, que se esfuerza por mantener la unidad de la lengua y la cultura con el respeto a las diversas tradiciones y comunidades que la habitan. Este es uno de los legados que el jeque Mujibur Rahman dejó a todos los bengalíes. Promovió una cultura de encuentro y diálogo, caracterizada por la sabiduría y por una visión amplia y previsora. Estaba convencido de que sólo en una sociedad pluralista e inclusiva, en la que cada persona pueda vivir en libertad, paz y seguridad, solo así, se construir un mundo más justo y fraternal.
Bangladesh es un estado joven y siempre ha tenido un lugar especial en el corazón de los Papas, que desde el principio han expresado solidaridad a su pueblo, han tratado de acompañarlo en la superación de las adversidades iniciales y lo han sostenido en la exigente tarea de construir y desarrollar la Nación. Espero que las buenas relaciones entre la Santa Sede y Bangladesh sigan floreciendo. Confío también en que el clima cada vez más favorable de encuentro y diálogo interreligioso, que he podido experimentar durante mi visita, siga permitiendo a los creyentes expresar libremente sus convicciones más profundas sobre el significado y la finalidad de la vida, y contribuya así a promover los valores espirituales que son el fundamento seguro de una sociedad pacífica y justa.
Queridos hermanos y hermanas, cuando conmemoran el cincuenta aniversario de su independencia, renuevo mi firme convicción de que el futuro de la democracia y la salud de la vida política de Bangladesh están esencialmente vinculados a sus ideales fundacionales y al patrimonio de diálogo sincero y de respeto de la legítima diversidad que han intentado alcanzar en estos años.
Como amigo de Bangladesh, animo a cada uno de ustedes, especialmente a las jóvenes generaciones, a renovar el esfuerzo de trabajar por la paz y la prosperidad de la noble nación que representan. Y les pido a todos que prosigan con su compromiso de generosidad y ayuda humanitaria a los refugiados, a los más pobres, a los desfavorecidos y a los que no tienen voz.
Con estos cordiales deseos invoco sobre el Golden Bangladesh y sobre todos sus ciudadanos abundantes bendiciones divinas.
Comentarios