En su Mensaje de Pascua de este 31 de marzo, el Papa Francisco recordó que el Resucitado es el único que puede quitar las piedras de la guerra y de las crisis humanitarias y abrir el camino de la vida. También hizo oración por las víctimas y los niños de Israel, Palestina y Ucrania, y pidió el intercambio de rehenes y el alto al fuego en la Franja de Gaza. Asimismo oró por Siria, el Líbano, Haití, el pueblo Rohingya y los países africanos en dificultades, subrayando también que con frecuencia el don de la vida es despreciado por el hombre.
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